Автор: Пользователь скрыл имя, 13 Мая 2013 в 17:02, реферат
La primera la provocaba la elección de Jeroen Dijsselbloem como nuevo presidente de los ministros de Finanzas de la zona euro, a quien España decidió no apoyar. El gobierno sabía que actuaba en solitario y además no tenía objeciones de fondo sobre la aptitud del holandés. Sin embargo, prefirió la protesta simbólica de la abstención por haberse quedado sin ningún representante entre los cargos relevantes en la gestión de una crisis donde el país se juega literalmente su futuro: ya sea el Eurogrupo, el Banco Central Europeo (BCE), el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) o los diversos supervisores financieros.